Lo que no debes hacer con un juguete sexual

Un juguete sexual es una estupenda manera para pasarlo genial y así disfrutar de tus relaciones íntimas de una forma que jamás habrías imaginado. Te ayudará a alcanzar el placer de una forma muy distinta.

Eso sí, no todo es tan bueno como parece. Existen algunos riesgos de utilizar juguetes sexuales que, aunque puedan llegar a parecer de sentido común, lo cierto es que puede acabar teniendo graves consecuencias para nuestro cuerpo.

 

¿Quieres saber todo lo que no tienes que hacer? Descúbrelo a continuación.

 

Protección anticonceptiva: Algunas personas piensan que existen artículos sexuales que son capaces de protegerles contra embarazos no deseados así como de enfermedades de transmisión sexual. Esta creencia es completamente absurda… de hecho, si no se mantiene una higiene adecuada, la probabilidad de transmitir una enfermedad es incluso mayor.

 

Lavavajillas: Algunas personas piensan que los juguetes quedarán estupendamente una vez hayan salido del lavavajillas… sin embargo, lo único que conseguiremos es estropearlos. La mayoría de ellos no tienen una composición como para poder soportar el lavado. Por no hablar de que, en el caso de tener pilas, puede acabar afectando al ámbito eléctrico de su interior.

Jamás se debería de lavar de esa manera.

 

Cuidado con las pilas: De igual manera que nos pasaría con cualquier elemento electrónico, si dejamos las pilas puedas podemos contribuir a que se oxide y que se termine estropeando. Si las quitamos después de su uso podemos conseguir que dure mucho más tiempo en perfecto estado.

 

Cuidado con la forma de limpieza: Para limpiar estos artículos existen toda una serie de productos especiales. Nunca se te ocurra innovar como algo nuevo: existen algunas sustancias que pueden llegar a dañar los juguetes de silicona.

 

No hagas muchas locuras con estos juguetes y no pasará nada.